7. El techo del mundo

El ser humano siempre se ha sentido fascinado por los puntos más extremos e insólitos del planeta tierra, ya que son los que resultan más atrayentes para sus desafíos o simplemente para saciar su curiosidad de conocer cada vez más y más curiosidades que hacen al mundo más especial si cabe.

Entre uno de los récords o puntos más emblemáticos que siempre ha atraído al ser humano se encuentra el del punto más alto de la superficie terrestre, es decir la montaña más alta, y esa sin lugar a dudas es el Everest, entre Nepal y el Tibet, con sus imponentes 8.848 metros.

Pero hoy lo que me lleva a hablar de esa zona del mundo, no es el Everest, sino lo que se ha conocido desde la época victoriana como "el techo del mundo", la Cordillera de Pamir.

Y lo que más me atrae precisamente de esta denominación, es que no siendo la mayor altura del mundo ni en promedio, ni teniendo una de las montañas mas altas (el pico más alto del Pamir, el Ismoil Somoni (antes llamado del Comunismo o Stalin) tiene 7.495 metros), es que fascinó a los habitantes por su imponente forma de mole inmensa que llevó a considerarla como techo para el planeta.

Se encuentra a caballo entre Tayikistan y Afganistán  y lindando con otros países como Pakistán o China, y podría considerarse geológicamente como una conjunción de cordilleras como el Hindu Kush o la vertiente occidental del Himalaya. Para grandes curiosos de las fronteras insólitas como un servidor, contiene uno de los pasos fronterizos mas extremos, el Corredor Wakhan que hace limite entre Afganistán y china (Si, estos dos países hacen frontera, no me negareis que os he sorprendido ;)

Pues si, estos son paisajes habituales en el Pamir, tanto en el lado Tayiko, como el lado Afgano, impresionantes montañas jalonadas de profundos valles, escarpadas paredes.... nieves eternas en las cumbres, bonitos paisajes verdosos en el corto verano...

En estas regiones tan inhóspitas, pastores y alpinistas extremos son los pocos que se atreven a recorrer sus intrincados recorridos. En Tayikistan, en un intento por hacerla un tanto más accesible y conectar la región oriental del país ubicada en el Pamir con la región occidental más poblada y donde se halla la capital Dushanbe, se construyó la Autopista del Pamir

Más bien podría considerarse una ruta semi-asfaltada, y poco asimilable con un concepto de Autopista Europea, pero si tenemos en cuenta el nivel económico del país que recorre en tres cuartas partes de su trazado (Tayikistan) y las condiciones extremas de una región como el Pamir, creo que podríamos estar ante uno de los nexos de comunicación más complejos en cuanto a trazado y ejecución que puedan existir.

En cuanto a viajar a la zona, no es que haya circuitos  organizados a este lugar con asiduidad, y ciertos de los países que se reparten el Pamir (Afganistán..) no son de lo más recomendable para un viajero sea muy o poco intrépido. Pero aún solo contemplar en imágenes estos bellos paisajes y rutas, permiten a gente amante de este mundo y de los fascinantes puntos extremos, soñar con rozar con los dedos alguna vez  el techo del mundo.

Hasta la próxima semana

6. De cabo a rabo

Hoy, para abrir este post, os muestro un esquema general de la "Autopista Panamericana", aunque si uno aprecia muchos de los tramos individualmente, mas se parece a un camino que a una autopista, y esto depende en demasía del estatus y poder adquisitivo del país que atraviese (La diferencia de PIB entre países como EEUU o Nicaragua puede ser casi abismal...)

Más de 47.000 kilómetros de recorrido (Varía según la ruta especifica que tomemos) interrumpido únicamente por un pequeño tramo de 87 km, al cual dedicaré ahora unas líneas. Es cierto que hay muchas variantes internas, que tienen que ver con diferentes rutas a lo largo sobre todo de la región de las guayanas-Venezuela, hay una variante que conecta con la Transamazónica y en EEUU-Canadá, pero lo que si está claro es el punto septentrional de inicio, Prudhoe Bay, en el circulo polar ártico en Alaska, y el meridional, Ushuaia, la ciudad del fin del mundo en la región del fin del mundo, la Patagonia Argentina.

Para los más curiosos, un par de récords que se han llevado a cabo recorriendo este continente de cabo a rabo, por la Panamericana:

- Parcialmente siguiendo la ruta, que es que el logró Tim Cahill, con 24 dias en ir de Prudhoe Bay a Ushuaia
- Totalmente (Salvo por el "Salto o Tapón de Darién), Kevin Sanders en moto en 2003, lo hizo en 34 días

Pero bien, en toda gran ruta, gran empresa o gran odisea a veces hay elementos que caprichosamente o como veremos ahora, con razones ecológicas de peso, se interponen en ese recorrido "de cabo a rabo"

Un tapón de pura naturaleza en estado casi-virgen, corta radicalmente la Panamericana entre panamá y Colombia, justamente entre lo que sería puramente Centroamérica y Sudamérica.. "El Tapón de Darién" que corta 87 km la tremebunda ruta panamericana. Si uno arriba por la parte septentrional, lo más lejos que puede penetrarse en esta selva por el lado panameño es hasta la localidad de Yaviza, y de ahí hasta Turbo en Colombia, una selva impenetrable, no perforada por carreteras, permanece impertérrita ante el afán humano de la conexión, del dominio de la naturaleza..

Afortunadamente todo proyecto de conexión por la vía más rápida  trazar una carretera, ha sido desestimado, y solo el cruce por ferry entre Panamá y Colombia facilita una vía cómoda y practicable, para aventureros o demás personas que quieran "cuasi-seguir" la panamericana. Eso sí, al margen de aventureros que en motos, bicicletas o a pie han penetrado por esta selva y cruzado a su manera el Tapón de Darién

Con tres imágenes de la Panamericana en Alaska, El Salvador y Chile cierro esta entrada de hoy, animando a todo el que quiera hacer al menos una parte de un recorrido que va claramente del cabo al rabo de algo, que la recorra y disfrute de esa diversidad del continente americano. Quién sabe, quizás haya algún intrépido que cruzando a pie el Tapón de Darién, ya le de sentido a este inmenso recorrido, cruzando la única parte que la naturaleza ha exigido reclamar para sí, y no para las obsesiones dominadoras del hombre sobre el medio natural.

Hasta la próxima semana

5. Micronesia Española

Atolón de Kapingaramangi (Compuesto de multitud de pequeñas islas), Pacifico occidental, en la Micronesia, región de Oceanía, perteneciente a los Estados Federados de Micronesia.....eh eh alto! esto último asi soltado como  una afirmación rotunda puede resultar una inexactitud si nos ajustamos a los términos más exactos de la soberanía y a lo que dicen los tratados internacionales de descolonización y cesiones de territorios. Así que aquí lanzo la bomba.. podríais estar contemplando un atolón coralino rodeado de aguas cristalinas perteneciente a España!

Pues si, existe una Micronesia Española, aunque se trate de una soberanía de facto, ya que nunca ha sido reclamada, y actualmente estos atolones llamadas en la toponimia castellana Guedes, Coroa, Pescadores (En la foto ahora llamada Kapingarangi) y las Islas Ocea pertenecen a otras naciones como los Estados Federados de Micronesia o Indonesia. 

Pero ¿Por qué? , porque ya no son españolas y porque no se reclama algo que en verdad podría ser Español. Para contextualizarlo hay que empezar con un poquito de historia y acudir a dos fechas enmarcadas en la debacle colonial española y el fin total del imperio donde no se ponía el sol:

10 de diciembre de 1898, París, tratado hispano-estadounidense y Madrid 30 de junio de 1899, tratado hispano-alemán.

En ninguno de estos dos tratados las mencionadas islas se incluyen en el listado de posesiones que España transfiere a soberanía norteamericana o alemana en cada caso. Por lo que al no incluirse como territorios de soberanía cesante, de facto estos territorios pueden seguir considerándose legítimamente españoles. 

En 1948 el tema se reabre y desde el régimen franquista se apunta la posibilidad de la reclamación de estos territorios, perola lejanía de los territorios (Ya no estaba aquella Manila Española desde la que se controlaban) el hecho de no ser miembros de la ONU y nuestra situación de aislamiento internacional, lleva a Francisco Franco a descartar tal empresa de reclamación.

Actualmente estos países están de alguna manera ocupados, y probablemente después de tanto tiempo hasta legítimamente por naciones de Oceanía, pero eso sí como español no descarto algún día en mis sueños poder elegir pasar mis vacaciones en alguna exótica isla como El hierro, Menorca o la Isla de los pescadores ;) y ¿por qué no soñar con nuestro propio pedazo del paraíso?, a lo mejor! hasta servía para reactivar nuestra maltrecha economía!

Hasta la próxima semana

4. Entre dos aguas

Esta fantástica y verdosa estampa abre mi entrada de hoy. Cerquita del ecuador (7-8º latitud norte) y en una de las partes mas estrechas del istmo centroamericano  se encuentra la llamada "Suiza de Centroamérica": Costa Rica; un hermoso lugar entre dos aguas (las del Pacífico y las de Atlántico) al que fui a parar hace ahora ya casi cinco años, en el verano de 2008.

Lo curioso del asunto es que tenía prácticamente cerrado para aquel año un viaje a un lugar extremadamente distante de este y diferente, la India, pero avatares relacionados con listas en un viaje, inscripciones etc.. dieron a parar con mis huesos a este pequeño pero hermoso país a caballo entre Norteamérica y Sudamérica  pero sobre todo entre dos océanos, la característica que mas me fascinó; ya que un día podías estar paseando por las blancas playas del caribe y al siguiente tener tras de ti el tumultuoso Océano Pacífico en  (Un ejemplo de ambas cosas por orden a continuación)

Lo que mas sorprende a la llegada a la capital de este país, San José, es el contraste entre la city financiera y corazón empresarial del país, y las zonas más humildes donde se amontonan casas rodeadas por rejas y primitivos sistemas de seguridad (Cristales sobre las tapias de las fincas) pero me imagino que para cualquier viajero que haya ido a este tipo de países, son cosas que no sorprenderán demasiado. Pero no nos engañemos, el encanto de este país no puede ser buscado en San José o ciudades cercanas como Alajuela, sino en los impresionantes enclaves naturales que jalonan el país y que describo a continuación (al menos los que pude visitar).

-Un primer aperitivo de todos los lugares principales que enumero más detalladamente a continuación es el Parque Nacional Braulio Carrillo, una manta boscosa que no deja indiferente

- Comenzando por el Parque Nacional de Tortuguero en la costa caribeña, una combinación de manglares, exóticas playas donde desovan las tortugas (impresionante espectáculo) y una exuberante flora&fauna.

-el parque nacional de Cahuita, seguimos en la costa caribeña, allí haciendo snorkeling en sus impresionantes colonias de Coral, se puede llegar incluso a avistar tiburones (esos sí, a la fuerza han de ser inofensivos..). Se complementa la visita a esta región sur oriental de Costa Rica con el disfrute del estilo de vida relajado del caribe y su mestizaje con población de color mas propia de las Antillas en la ciudad de Limón.

-El Volcán Arenal y El parque de Monteverde: Esta región del interior al norte ya es para los aventureros y los que gustan de emociones fuertes: Tirolina sobre la selva, bañarse en aguas termales salvajes, ascender por las coladas de lava y las tierras calcinadas del volcán, disfrutar del sobrecogedor espectáculo de un penacho de lava rojizo saliendo del cono del Volcán.. En definitiva en el camino de un océano a otro, y puramente en la mitad de esta tierra entre dos aguas, descubrimos la parte de naturaleza más extrema de Costa Rica.

-Como punto final y llegada al otro lado, cerrando el circulo de las dos aguas, Quepos y el Parque nacional de Manuel Antonio, en el Pacífico Costarricense: hablamos de una jungla poblada de monos, serpientes y osos perezosos, en el que pude encontrar la esencia de lo quee s una jungla salvaje, un territorio indómito donde uno se encuentra pequeño en comparación con la naturaleza desenfrenada e incontrolable que le rodea.

Dije punto final y mentí ya que de regreso al interior y antes de tomar el avión de regreso aún espera una última sorpresa llamada Volcán Poás

En definitiva, esta amigable tierra entre dos aguas esconde secretos muy agradables que descubrir, una naturaleza semi-virgen en algunas ocasiones y sobre todo ese atractivo, que para mi al menos es fantástico, que supone poder abordar dos masas de agua de proporciones gigantescas tan solo pasando unos kilómetros (por otra parte llenos de magia y encanto)